El 22 de abril de 1970 el senador estadounidense Gaylord Nelson convocó al primer gran acto ambientalista en el mundo. Veinte millones de norteamericanos se tomaron las calles y los parques, para protestar en contra del deterioro ambiental.
Recién en 1990 el Día de la Tierra se internacionalizó, para dar paso a una celebración global del medio ambiente y de nuestro compromiso con su protección.
"La Tierra es nuestro hogar y el hogar de todos los seres vivos. La Tierra misma está viva. Somos partes de un universo en evolución. Somos miembros de una comunidad de vida interdependiente con una magnificente diversidad de formas de vida y culturas. Nos sentimos humildes ante la belleza de la Tierra y compartimos una reverencia por la vida y las fuentes de nuestro ser..." (extracto de la "Carta de la Tierra").
El planeta donde vivimos, la hermosa bola azul y blanca (si se mira desde el espacio)...¡está de fiesta!. El 22 de abril se celebra su día, el Día Mundial de la Tierra.
Eso sí, ella no debe tener muchos motivos para celebrar. El calentamiento global que está sufriendo, el deterioro de la capa de ozono, la muerte de los bosques y la contaminación de los suelos, entre muchísimas otras "enfermedades", la tienen bien a maltraer.
Sin embargo, la idea de este día es reflexionar y generar conciencia, para impulsar acciones en torno a la problemática ambiental y la preservación de nuestro planeta.
Actos públicos, campañas de reciclaje y de incentivo al uso de transportes no contaminantes, plantaciones masivas de árboles y jornadas de sensibilización, son sólo algunas de las acciones que se llevan a cabo este día, en todo el mundo.
Este año la celebración del Día de la Tierra se centrará en la campaña "Agua para la Vida" iniciada el 2003, y que se extenderá hasta fines del 2004. Se enfoca al mejoramiento del acceso al agua, sus usos y las instalaciones sanitarias.
El objetivo es mejorar el manejo de los recursos hídricos de nuestro planeta en todos los ámbitos: local, nacional, regional y global.
El gran comienzo
Todo comenzó en 1970, cuando Gaylord Nelson, senador de Estados Unidos, incentivó el desarrollo de una protesta a nivel nacional para "despertar" al aparato político e instalar el tema ambiental en la agenda del país. Con ese principio, el 22 de abril de ese año ¡20 millones de estadounidenses! salieron a las calles, parques y auditorios para exigir un ambiente sano y limpio, y protestar en contra del deterioro ambiental.
"El Día de la Tierra alcanzó lo que yo ansiaba. El objetivo consistió en demostrar una inquietud tan grande por el ambiente a nivel nacional, que sacudiera la arena política. Fue una jugada riesgoza, pero funcionó... Realmente fue una asombrosa explosión popular... El Día de la Tierra se convirtió en la primera oportunidad que jamás habían tenido para unirse en una manifestación nacional que enviara un gran mensaje a los políticos: el mensaje de que despertaran e hicieran algo" (Gaylord Nelson).
Y así fue, porque la protestas sirvió para que un sinnúmero de grupos que habían estado luchando por cosas diversas como los derrames de aceite, la protección de la vida salvaje, la contaminación de las industrias y la correcta disposición de los residuos, supieran de la existencia de los otros y de los ideales que compartían.
Gracias a este primer Día de la Tierra se creó también la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y se aprobaron las leyes de Aire Limpio, Agua Limpia y Especies en Peligro. Además, las organizaciones populares, hoy ONGs, aumentaron en tamaño y poder.
En 1990, el Día de la Tierra pasó a ser internacional. Encabezado por Denis Hayes, organizador principal del primer Día de la Tierra, abarcó a empresas, minorías étnicas y funcionarios públicos. Así las cosas, se convocó a los países del mundo para que todos asumieran las diferentes problemáticas ambientales.
Cuando se acercaba el cambio de milenio, los temas y las campañas se orientaron hacia el calentamiento global y la necesidad de contar con apoyo para generar energías limpias. Y el Día de la Tierra 2000 combinó la festividad del primer día (1970) con el activismo del de 1990, el cual fue apoyado por la tecnología, lo que permitió que todos los interesados se unieran a través de la red: más de cinco mil grupos participaron en 184 países.